sábado, 14 de abril de 2012

Vamos por el Boleto Universitario!


La lucha por el boleto estudiantil tiene historia, y es la historia de los estudiantes secundarios de La UES que en la denominada “noche de los lápices” fueron víctimas del terrorismo de estado, por el reclamo legítimo de este derecho y por la lucha por un país con justicia social. Derecho que se funda en la concepción de la educación como un bien social, y medio para el crecimiento sustentable del país. En este sentido, hoy la Universidad es central para proporcionar el desarrollo de un modelo nacional basado en la independencia económica y soberanía sobre nuestros recursos, incorporando la ciencia y la tecnología para tales fines.
En estos años se ha avanzado en la creación de nuevas universidades en todo el territorio nacional, favoreciendo el ingreso a las mismas de nuevas generaciones de estudiantes, que por primera vez en su historia familiar acceden a estudios superiores. Esto ha llevado a un crecimiento de la población universitaria, existiendo la posibilidad de tener un país con educación superior al alcance de la población que hasta hace muy poco estaba excluída. En este contexto, debemos lograr que se acompañe el acceso a la universidad con garantías de permanencia y egreso universitario. El boleto universitario es una instancia para lograr acceder, permanecer y poder egresar.

Hoy nos encontramos en un momento bisagra para el sistema de transporte. El aumento del precio del boleto de subtes y  la posibilidad de encarecimiento del pasaje de colectivos nos obliga a pensar y establecer políticas que otorguen prioridades. En este sentido, los universitarios que deben viajar para poder estudiar constituyen un sector fundamental a proteger. Si la quita de subsidios a las empresas del transporte se acompaña de boletos subsidiados a los pasajeros que lo necesitan, estaremos en presencia de una planificación estratégica de los recursos del país y de la orientación de los mismos comprometidos con un desarrollo más justo. Es momento de reimpulsar el boleto universitario de tarifa reducida.
Contamos con ejemplos recientes de su implementación en Córdoba y en La Plata, pero creemos fundamental contar con una ley nacional. El boleto universitario debe ser abordado de forma interjurisdiccional ya que quienes estudiamos muchas veces debemos atravesar varias jurisdicciones desde nuestros hogares hacía los lugares de estudio. Y en el caso de la UBA el 60% de los estudiantes viaja desde el conurbano a la Ciudad de Buenos Aires diariamente. Por esto, impulsamos la sanción de una ley nacional que permita crear el marco de derecho al pasaje de tarifa reducida para universitarios en toda la Argentina. Es un derecho de todos quienes accedemos a la universidad pública en nuestro país.
Un país con un territorio extenso debe subsidiar el precio del boleto ya que de no hacerlo caeríamos en el transporte para pocos, dejando en manos del mercado la fijación de tarifas, tan bien pregonado por el modelo neoliberal de los ´90. De no haber subsidios, el pasaje sería prácticamente inaccesible.  El rubro transportes cuenta con empresarios que han especulado con los subsidios, por lo cual son los pasajeros quienes deben ser sujetos de recibir los subsidios.
Hoy el Estado cuenta con esta herramienta, a través de la digitalización del Sistema Único de Boleto Electrónico (SUBE), lo que permite dirigir los subsidios a los consumidores mismos, evitando la intermediación de los empresarios de colectivos y transporte en general.
Año tras año hemos continuado la lucha  por el Boleto Universitario. En el año 2006, impulsamos la campaña en todas las Facultades de la UBA, y los años siguientes continuamos llevándolo a los distintos órganos de gobierno universitario. En el 2011 apoyamos el proyecto de ley elaborado por Adriana Puiggros para ser tratado en el Congreso de la Nación, la necesidad de contar con becas, comedores, jardines maternales, y transporte, entre otras cosas. Actualmente hay un proyecto de ley presentado por Daniel Filmus que plantea la necesidad del boleto universitario, discutiéndose en la comisión de transporte del Senado.
Somos nosotros los estudiantes universitarios quienes debemos correr las fronteras  y avanzar en nuestras reivindicaciones.